"Venga...a la cama que si no no van a venir los Reyes Magos", eso es lo que escuchan miles de niños un 5 de Enero después de ir a ver las cabalgatas con sus padres, se irán a la cama, pero no podrán dormir.
Los más peques de la casa disfrutaron mucho viéndolas, lo que mas ilusión le haría sería ese despertar por la mañana y ver ese salón lleno de regalos envueltos, unos mas grandes y otros más pequeños, aunque no por eso menos especiales, abrirlos, destrozar el papel por el ansia de saber lo que te espera detrás del envoltorio...
Muchos ya han perdido esa ilusión por la Navidad, esas ganas de levantarte con una sonrisa, esa intranquilidad de no poder dormir la noche antes porque no sabes lo que te esperas, y esque, con la cosa de crecer y creerse mayor o adulto, la mayoría de las personas pierde interés por la Navidad.
Pues yo, el 5 de Enero por la noche, sigo nerviosa por lo que me va a esperar mañana, porque no me gustaría perder esa ilusión, ese espíritu navideño que todos teniamos cuando pequeños, si, algún día creceremos y tendremos que hacerlo igual que nuestros padres ahora, pero mientras tanto...
